«Encuentro la televisión muy educativa. Cada vez que alguien la enciende, me retiro a otra habitación y leo un libro«. Groucho Marx
El 19 de agosto de 1977, el mundo del ingenio perdía a uno de sus mayores exponentes: el enorme Groucho Marx.
Poco te podría contar que no se haya contado ya de él. Sin embargo, quiero que observes una de sus mayores cualidades. Quizá la que más le aupó al éxito y la fama. Su falta de prisa en responder.
Groucho escuchaba las preguntas, pensaba un momento con aire relajado, y su ingenio bullía una de sus fantásticas respuestas.
Es una cualidad casi extinguida en un mundo dominado por la prisa y bajo el yugo del estrés, pero hay que recuperarla.
¿Qué problema hay en pensar un poco las respuestas antes de contestar? Dicen que un par de segundos no llevan a ningún sitio. Pues bien, un par de segundos te pueden servir para permitir que tu cerebro elabore la respuesta adecuada. Lo que te puede llevar muy lejos.

Como un comentario de Groucho sin algunas de sus célebres citas no se puede considerar como tal, aquí te recuerdo un puñado de las más gloriosas:

«Partiendo de la nada hemos alcanzado las más altas cumbres de la miseria»

«Nunca pertenecería a un club que admitiera como socio a alguien como yo»

«Nunca olvido una cara, pero con la suya voy a hacer una excepción.»

«Por quién me ha tomado, yo tengo unos principios…y si no le gustan tengo otros«.

«Disculpen que les llame caballeros, pero es que aún no los conozco bien»
Y un enlace a una entrevista cuando ya era octogenario en la que se aprecia y disfruta en todo su esplendor el arte de escuchar, meditar y responder sin prisa y con ingenio. Que lo disfrutes: